En el afán de facilitar la comprensión de la meditación para la mente occidental, nos ilustra una nueva forma de entender este antiguo, interesante y misterioso “arte de vivir”.
Ciudad de México, Octubre, 2021 – “He inventado un nuevo término, Psicología de la No-Mente, porque me di cuenta que en la comprensión de qué cosa es la meditación, nosotros los occidentales, tenemos un problema al origen del asunto, que está justo en la palabra “meditación”, la cual utilizamos para traducir el término original sánscrito “dhyan” o “dhyana” “, señala Prem Dayal, creador y fundador de Prem Dayal School of Meditation.
Como sabemos, las palabras se forman a raíz de una experiencia. Por ejemplo, la palabra sol es muy común en todas las culturas, se deriva de una experiencia que todos tenemos: la mañana por donde sea, se levanta el sol. Esto, sin embargo, no es válido para otras palabras. Otro gran ejemplo, es evidente que en el vocabulario de una población primitiva no se encontrarán palabras como teléfono o tren, porque ellos jamás tuvieron la experiencia del teléfono o del tren.
Este es el problema que occidente ha encontrado con el término “dhyan” y los occidentales no tienen la experiencia que los místicos orientales indican con esta palabra. Los occidentales conocen la “meditación” pero no conocen dhyan. Y el hecho que sean dos experiencias que se refieren al mundo interior no implica que sean la misma cosa. Sería como si en un lugar donde no tienen la experiencia de la música, se tradujera la palabra “música” con la palabra “sonido”, solo porque las dos se refieren a una experiencia del oído. Es evidente que, si quisiéramos entender de qué se trata la música tomando como referencia los sonidos o, aún peor, los ruidos, partiremos con el pie equivocado.
Para entender mejor empecemos a ordenar conceptos: la experiencia de la meditación está a la experiencia de dhyan, como la palabra sonido está a la palabra música. Sólo aparentemente son similares. Entonces, ¿cuál es la diferencia?, la distinción corresponde a la diferente forma en la cual el oriente y el occidente se han desarrollado a nivel intelectual: el occidente, desde Aristóteles se han enfocado en el conocimiento en el objeto; y en el oriente, desde Patanjali se han enfocado en el sujeto, o sea en la consciencia que quiere conocer el objeto.
La palabra “meditación” se refiere a la acción de meditar acerca de algo, de un objeto. El término “dhyan” al objeto no lo toma ni en cuenta y se limita a preguntar: “¿quién soy yo que estoy meditando sobre este objeto?” Podemos entender que sea fácil en occidente, para quien se pone a meditar, empezar a hacer algo que nada tenga que ver con la experiencia que los místicos orientales indican con “dhyan”.
Es por esto que, para darle la vuelta al problema, Prem Dayal ha decidido nombrar al asunto de una forma más cercana y comprensible para la mente occidental: Psicología de la No-Mente. Se trata de una paradoja o incluso de un oxímoron, en cuanto no se puede imaginar una psicología en ausencia de mente. Sin embargo, es justo esta la experiencia que dhyan indica.
“Con el enorme deseo de compartir de la forma más sencilla lo que he aprendido en estos últimos 35 años de mi vida estudiando y vivenciando los “secretos” de los místicos orientales, los invito a todos a inscribirse a mi escuela y aprender la Psicología de la No-Mente tiene para ofrecer”, concluye el experto.
La Psicología de la No-Mente, o dhyan o “meditación”, se ocupa de la mente, como hace cualquier psicología, pero no para analizarla y arreglar sus mecanismos, sino para tener una experiencia del sujeto que la analiza de la consciencia que la observa. No se trata de arreglar las disfunciones de la mente, sino de darse cuenta que tú no eres tu mente y sus disfunciones.
Para aprender más sobre esta filosofía, la escuela online www.premdayal.net recibe a cualquier persona que quiera tener una nueva y fresca perspectiva con grandes beneficios para afrontar determinadas situaciones en el trabajo y en la vida en general al implementar las correctas herramientas que su fundador ha perfeccionado a través de más de 3 décadas.