El Dr. Demetrius Maraganore Director de Ruth Cain Ruggles del Departamento de Neurología de NorthShore, la Dra. Katerina Markopoulou, neuróloga de NorthShore y El Dr. Eric Ahlskog, respetados neurólogo de Mayo Clinic ofrecen sus estudios y evidencias para avalar su investigación
Científicos alertan sobre efectos negativos que vendrían a modificar el tratamiento de la enfermedad del Parkinson.
Destacados especialistas en la enfermedad del Parkinson revelan que de acuerdo a estudios llevados por científicos del Sistema de Salud de la Universidad de NorthShore y de Mayo Clinic quienes colaboraron en un estudio sobre este padecimiento ofrecen evidencias genéticas y clínicas respecto a que las terapias dirigidas contra la expresión de la alfa-sinucleína, gen cuya función participa en el desarrollo y avance de la enfermedad de Parkinson, posiblemente pueden acelerar el avance del padecimiento y aumentar el riesgo de presentar discapacidades físicas y demencia. Si se reproducen los resultados, los investigadores del dicho estudio, adelantaron que: “las terapias en desarrollo para la enfermedad de Parkinson sufrirán profundas modificaciones”.
“Nuestra investigación -afirman los investigadores- plantea que las terapias que buscan reducir la expresión de la alfa-sinucleína en la enfermedad de Parkinson, en realidad, podrían acelerar su proceso y aumentar el riesgo de desarrollar grave discapacidad física y demencia. Consideramos que es nuestra responsabilidad publicar estos datos, porque este tipo de tratamiento puede conllevar efectos nocivos a largo plazo”, señala el autor principal, Dr. Demetrius Maraganore, Director Ruth Cain Ruggles del Departamento de Neurología de NorthShore.
La alfa-sinucleína -preciso él co-autor del estudio- es uno de los componentes principales de los cuerpos de Lewy, característica anómala de las células cerebrales presente en todos los casos de la enfermedad de Parkinson. Desde el descubrimiento hace más de dos décadas, de la alfa-sinucleína como causa de la enfermedad de Parkinson familiar, ésta ha sido el centro de grandes esfuerzos científicos por caracterizar definitivamente la función de la proteína en la enfermedad de Parkinson idiopática y su potencial como objetivo para las terapias de neuroprotección. Además señalan los científicos: ha sido el centro de varios esfuerzos por desarrollar una molécula para suprimir la función de la proteína. Una vacuna dirigida hacia la alfa-sinucleína (que disminuye los niveles de alfa-sinucleína) actualmente se encuentra en la fase I de los ensayos clínicos, y una cantidad de moléculas dirigidas contra la proteína para reducirla se encuentran en las últimas etapas del desarrollo preclínico.
“Es la primera vez que se observa que la expresión excesiva de la alfa-sinucleína aumenta el riesgo de desarrollar la enfermedad de Parkinson y que, por el contrario, la expresión mínima se vincula con peores resultados motores y cognitivos una vez empezada la enfermedad. Surge, entonces, la duda respecto a la eficacia y seguridad de las terapias creadas para reducir la expresión de la alfa-sinucleína en la enfermedad de Parkinson”, comenta por su parte la primera autora, Dra. Katerina Markopoulou, neuróloga de NorthShore.
Los connotados científicos dieron seguimiento médico a más de un millar de pacientes de Mayo Clinic durante casi 15 años (la mediana fue de ocho años), realizando la secuencia del ADN de los pacientes para determinar la presencia de las variantes genéticas que regulan la cantidad de proteína alfa-sinucleína producida. Los científicos estudiaron la asociación entre dichas variantes genéticas y la supervivencia de los pacientes sin graves discapacidades motoras o cognitivas. Los resultados obtenidos por los pacientes se midieron mediante entrevistas telefónicas.
Los mencionados científicos descubrieron que los pacientes con menor expresión genotípica corrían un riesgo 23 por ciento mayor de terminar en una silla de ruedas o desarrollar demencia.
El Dr. Eric Ahlskog, respetados neurólogo de Mayo Clinic y autor del estudio explica que “Se trata del primer gran estudio genético de asociación de la alfa-sinucleína y resultados longitudinales en la enfermedad de Parkinson. Si se reproducen nuevamente los resultados, la investigación puede cambiar el paradigma de tratamiento enfocada en la reducción de la alfa-sinucleína para la enfermedad de Parkinson”.
El estudio se presentó durante la pasada reunión anual 2013 de la Academia Americana de Neurología (AAN, por sus siglas en inglés), realizada en San Diego. Esta investigación es un ejemplo del esfuerzo colaborador entre NorthShore y Mayo Clinic, bajo la Red de Atención Médica de Mayo Clinic que es una sociedad única que ofrece a los pacientes de NorthShore acceso a los recursos médicos y expertos de ambos sistemas que trabajan conjuntamente para su beneficio.
Cabe destacar que este estudio se financió gracias a los Institutos Nacionales de Salud, Alnylam Pharmaceuticals Inc., y Medtronic Inc.
Acerca de Mayo Clinic
Mayo Clinic se ha enfocado en las necesidades de sus pacientes por más de 100 años. Es la primera y más grande institución de práctica médica sin fines de lucro en el mundo. Mayo Clinic es evaluada y reconocida por el mayor número de sistemas de clasificación (Ranking) que cualquier otro hospital o clínica en los Estados Unidos. Médicos de 58 especialidades distintas trabajan colectivamente en beneficio del paciente, unidos por una filosofía enfocada en colocar al paciente como su prioridad. Alrededor de 3,800 médicos y científicos, y 50,900 empleados trabajan en las clínicas y hospitales de Mayo Clinic atendiendo a más de 1 millón de personas cada año.