México D. F., 6 de febrero (Redacción LaSalud.com.mx).- Investigadores del Centro Médico de la Universidad de Rochester en Estados Unidos, advirtieron que los países más grandes del mundo en desarrollo serán los más afectados por un incremento en los casos de la enfermedad de Parkinson dentro de los próximos 25 años.
Después de estudiar las tasas de crecimiento proyectadas para los cinco países más grandes de Europa Occidental (Francia, España, Alemania, Reino Unido e Italia) y para los diez países más poblados del mundo (China, India, Indonesia, Estados Unidos, Brasil, Pakistán, Bagladesh, Nigeria, Japón y Rusia), además de la prevalencia de la enfermedad por grupos de edad; se llegó a la conclusión de que el número de casos de Parkinson en esos 15 países aumentará de 4.1 millones a 8.7 millones para el 2030.
A pesar de este incremento en las naciones mencionadas, será en los países en desarrollo donde se presente el mayor crecimiento. “El impacto más grande de la enfermedad de Parkinson en los próximos 25 años no será en Estados Unidos o Europa, ocurrirá en las naciones más grandes del mundo en desarrollo, donde esta enfermedad no se percibe como un problema de salud importante”, explicó el doctor Ray Dorsey, director de la investigación.
En opinión de Urit Lacoa, presidenta de la Liga chilena contra el Parkinson, la mayoría de los países en desarrollo no están preparados para enfrentar el problema. “En nuestros países tenemos un gran desconocimiento de la enfermedad. Es necesario educar a las familias y a las comunidades sobre cómo tratar al enfermo de Parkinson”, aseguró.
Los expertos señalan que la detección precoz es esencial para mejorar el impacto de esta y otras enfermedades crónicas. Sin embargo, el no establecer sistemas apropiados de cuidados médicos y apoyo social, puede derivar en pérdidas económicas importantes en los países más necesitados causadas por la enfermedad.
El entendimiento y la predicción del impacto de estas enfermedades son fundamentales a la hora de establecer políticas de salud, sociales y económicas en los países en desarrollo.
La enfermedad de Parkinson es un padecimiento asociado con la edad, por lo que el aumento en la expectativa de vida hace vislumbrar un aumento considerable del mismo, señaló Lacoa y agregó: “necesitamos empezar ahora a poner en práctica una infraestructura capaz de soportar la carga del mal de Parkinson, que hoy es pequeña, pero que se convertirá en una carga enorme en el futuro”. (BBC Mundo)