CLIMATERIO%u201D
entre salud y enfermedad ha cambiado rápidamente apenas en el último siglo y
hemos pasado del predominio de las enfermedades infecciosas al de las
enfermedades cardiovasculares y el cáncer. En la actualidad comenzamos a entrar
en la tercera etapa marcada por problemas crónicos dependientes de la edad,
como la artrosis, la osteoporosis, la incontinencia urinaria y la enfermedad de
Alzheimer.
La transición demográfica que ha experimentado nuestro país,
al igual que el resto de Latinoamérica, ha generado el paso de una población de
personas jóvenes a una población de personas mayores. Se reconoce hoy en día,
que la humanidad está envejeciendo rápidamente y en términos simples nuestro problema
es que como individuos esperamos tener una larga vida saludable; sin embargo,
como sociedad, nos preocupan las consecuencias agregadas del envejecimiento y,
sobre todo, no estamos preparados para hacer lo necesario desde el punto de
vista médico y socioeconómico.
Unidas, uno de cada diez habitantes del planeta supera los 60 años de edad y se
espera que para el año 2050, una de cada cinco personas supere esa edad; en
relación con la población más anciana, los mayores de 80 años, que actualmente
suponen 12% de los que superan los 60 años, crecerán hasta un 19% y se estima
además que el número de centenarios pase de los 210,000 actuales a 3;200,000 en
el año 2050. En América Latina la población mayor de 65 años para el año 2025
será alrededor del 10%, cifra que representa un 100% más de lo que representaba
en 1990.
En México actualmente existen más de 7 millones de mujeres
mayores de 50 años con una expectativa de vida de 77 años y, al tiempo que la
preocupación por %u201Cvivir más%u201D se deja sentir, pero también se percibe la
necesidad por %u201Cvivir mejor%u201D.
Muchos síntomas y signos del envejecimiento están asociados a
la Menopausia, etapa de la vida de la mujer también conocida como Climaterio,
que se define como el cese permanente de la menstruación y tiene correlaciones
fisiológicas, con la declinación de la secreción de estrógenos por pérdida de
la función folicular; este envejecimiento reproductivo se caracteriza por una
amplia variación en la frecuencia e intensidad de los síntomas vasomotores como
los bochornos o sofocos, las oleadas de calor, la sudoración nocturna y la
resequedad vaginal, la urgencia e incontinencia urinaria, el insomnio, la
depresión, la fatiga crónica y la dificultad en la concentración, entre otros
más son motivo de acudir a consulta médica.
En la descripción nos
quedaríamos cortos al no contemplar los aspectos sociales y psicológicos, tales
como el miedo a envejecer, la preocupación por la auto imagen, la inestabilidad
conyugal, la problemática sexual, la percepción del %u201Cnido vacío%u201D, la
preocupación por la subsistencia, la jubilación, la viudez, el temor a la
soledad y el desamparo.
Cabe resaltar que para un número importante de mujeres, la
menopausia puede presentarse en forma relativamente asintomática; no obstante,
esta etapa en la vida de la mujer se relaciona estrechamente con padecimientos
como la enfermedad cardiovascular y la osteoporosis, los cuales pueden ser
prevenidos si se modifican algunos hábitos en el estilo de vida y se recibe un
tratamiento médico adecuado, mejorando así la calidad de vida.
Es por todas las
anteriores razones que diversas agrupaciones médicas como la Asociación
Mexicana para el Estudio del Climaterio se han dedicado a difundir los
conocimientos que se han generado sobre la menopausia en nuestro país y en el
mundo, teniendo una posición de liderazgo en este campo haciendo una llamada de
atención en las autoridades sanitarias y en la población general sobre la
importancia de esta etapa de la vida de la mujer
AMEC %u201CTrabajando Juntos por la Salud de la Mujer en
CLIMATERIO%u201D